lunes, 15 de agosto de 2016

Contentamiento

En el día de ayer me dispuse a ir a la tienda a comprar algunos alimentos, pero como es normal me detuve en el pasillo de los artículos de decoración de hogar, cristalería, caballeros, zapatos y las carteras…en especial llamó mi atención una cartera, me gustó mucho.
Al hacer algunos cálculos deduje que sería un gasto que no podíamos hacer,  vino la tristeza por no tener el dinero para comprar aquello que mis ojos y mi carne deseaban, me fuí de la tienda pensando en ello.

Esta mañana al tener mi tiempo de lectura y oración, el Espíritu Santo trajo a mi mente este suceso y medite en cómo me había sentido en ese momento, llegando a la conclusión de que no era correcto entristecerse por no poder poseer un bien material.
Inmediatamente busqué me biblía y leí en 1 Timoteo capítulo 6. Fue como una ducha de agua helada, trajo a mi mente lo mismo que he estado estudiando por meses “el contentamiento cristiano”. He aprendido mucho sobre el verdadero contentamiento, ese espíritu quieto, feliz y en paz con Dios sin importar las circunstancias, estar satisfecho con lo Dios nos ha provisto.

Yo tengo todo lo que necesito y mas. Pablo a través de Timoteo nos enseña algunas cosas:
-La piedad debe estar acompañada de contentamiento.
-Cuando muramos no podremos llevarnos nada de lo acumulado en esta tierra.
-Debemos estar contentas con lo básico.
-El amor al dinero es raíz de todos los males.
-Nuestra vida no debe estar centrada en ser ricas, esto nos lleva a pecar.

En vez de enfocar nuestra vida en lo material, seamos felices en agradar a Dios, vivir piadosamente.


Hermanas amadas no seamos turbadas por las cosas que este mundo nos está ofreciendo: ropa, zapatos, un Smartphone, auto, casa propia, viajes…si las puedes tener disfrútalas, pero si no puedes tenerlas, que tu ánimo no cambie, que esto no traiga pesar a tu vida. Agradezcamos a Dios por lo que nos ha dado, somos salvas en Cristo…¿Hay mayor riqueza que esta?

No hay comentarios:

Publicar un comentario