miércoles, 21 de octubre de 2015

Una Mujer Prudente




Para muchos de nosotros el que una persona sea imprudente, resultará algo normal. Dios no lo ve de esta manera, la prudencia es demandada por él en cada una de nosotras. Debemos ser consientes de que en este aspecto las decisiones que tomemos pueden trascender más allá de lo que imaginamos, sino actuamos con cautela.

La palabra prudente se puede traducir según el diccionario Vine, de la siguiente forma: alguien sensato, dominio propio. El Espasa dice que es una persona de buen juicio, precaución, mesura y cautela. Laurose, la define como la virtud que hace evitar peligros, una persona de cordura y ecuanimidad.

Luego de haber definido esta palabra, surge una interrogante: ¿Por qué hablar de este tema con mujeres cristianas? No se supone que somos prudentes. Pues al igual que cualquier cualidad de carácter esta muchas veces nos falta y entonces, debe ser cultivada.

Si echamos una miradita a Tito capitulo 2, encontramos a Pablo exhortando algunas cosas a Tito, para ser enseñadas en la iglesia, entre estas encontramos la prudencia.
Vs. 2 que los ancianos sean…prudentes
Vs. 3 las ancianas así mismo sean y enseñen…prudencia
Vs. 6 exhorta a los jóvenes…prudentes

La prudencia es algo que debe caracterizar a todo creyente, ya sea viejo o joven, hombre o mujer, todos debemos modelar este carácter. A las mayores primero le exhorta a que en su vida exhiban prudencia, para luego ser parte del programa de enseñanza a las mujeres mas jóvenes.
Tit 2:3  Las ancianas asimismo sean reverentes en su porte; no calumniadoras, no esclavas del vino, maestras del bien;
Tit 2:4  que enseñen a las mujeres jóvenes a amar a sus maridos y a sus hijos,
Tit 2:5  a ser prudentes, castas, cuidadosas de su casa, buenas, sujetas a sus maridos, para que la palabra de Dios no sea blasfemada.

Esto me recuerda un verso en proverbios muy peculiar:

Pro 19:14  La casa y las riquezas son herencia de los padres;
 Más de Jehová la mujer prudente.

Una esposa así, es más valiosa que muchas riquezas. Los padres pueden pasar toda su vida trabajando para dejarnos una gran herencia, negocios, bienes materiales e inmuebles. Pero, la mujer virtuosa es un regalo de Dios. ¿Por qué debemos ser prudentes? ¿Por qué al ser prudentes nos convertimos en un regalo para los demás?


Para contestar estas preguntas vamos a ver algunas características de la mujer prudente:

1.      Sabe cuándo debe callar,
Pro 10:19  En las muchas palabras no falta pecado;
 Más el que refrena sus labios es prudente.

La mujer prudente es reservada, no es suelta de lengua. Tiene dominio de lo que habla, trata por todos los medios de no pecar al hablar. Sabe que si hablamos mucho, algo que no debíamos decir se nos va escapar. Se detiene y piensa antes de emitir un juicio o contar una situación. Sus palabras tienen el propósito de bendecir. Debemos aprender a ponerle freno a nuestros labios, aplicar el fruto del espíritu que es templanza y parar de hablar cuando debemos.

2.      Es sabia,
Pro 16:21  El sabio de corazón es llamado prudente,
 Y la dulzura de labios aumenta el saber.
Pro 13:16  Todo hombre prudente procede con sabiduría;
 Mas el necio manifestará necedad.

Las mujeres sensatas (prudentes, de buen juicio), son llamadas sabias, inteligentes, ya que la sabiduría es lo que hace prudente su boca. Una mujer prudente procede con sabiduría. No toma decisiones a la ligera, piensa bien antes de actuar.

Pro 16:23  El corazón del sabio hace prudente su boca,
 Y añade gracia a sus labios.

3.      No hace caso a insultos, no cae en provocaciones,
En el transcurso de nuestra vida, nos veremos envueltas en situaciones en las cuales no desearíamos estar, pero es imposible. Me explico, muchas veces no buscamos estar en problemas, ni siquiera ha pasado por nuestra mente un mal contra tal persona, pero llega alguien que se ha propuesto destruir nuestra paz, testimonio, ministerio, familia, relación laboral. ¿Has tenido una vecina molesta? O ¿una hermana en la fe que te envidia?, bueno en esas situaciones debemos mostrar prudencia, que se expresará por el fruto del espíritu en nosotras, la mansedumbre. También mostrando dominio propio para no responder igual a los insultos, provocaciones, etc.

Pro 12:16  El necio al punto da a conocer su ira;
 Más el que no hace caso de la injuria es prudente.

4.      Admite consejos.
Psa 2:10  Ahora, pues, oh reyes, sed prudentes;
 Admitid amonestación, jueces de la tierra.

La mujer prudente no solo acepta los consejos, sino que los busca. Ella desea hacer las cosas bien, ser sabia y ese deseo por agradar a Dios le llevará a ser humilde y saber que no lo sabe todo. Se rodeará de personas prudentes que le servirán de apoyo a la hora de actuar. A veces por nuestro orgullo les es difícil a los demás aconsejarnos o amonestarnos, nos mostramos tan fuertes, tan seguras, tan firmes y sin necesidad de nadie, que hacemos que quienes desean corregirnos o guiarnos mejor se retraigan. Mejor seamos prudentes y mostrémonos dóciles y enseñables.

5.      Es precavida, se prepara para el porvenir,
Pro 31:21  No tiene temor de la nieve por su familia,
 Porque toda su familia está vestida de ropas dobles.

La prudencia incluye cautela, cuidado, no quedar sorprendida ante una situación relativamente inesperada. La mujer prudente se mantiene alerta, velando, prepara con tiempo lo que ha de necesitar, no le da cabida a la improvisación constante, actúa con cuidado.

Concluyendo…
Solo les he presentado 5 características de una mujer prudente, en la palabra podemos encontrar más. Pero a la luz de estas ya mencionadas, si nos hacemos un test ¿Cuál sería nuestra calificación? ¿Diríamos que estamos creciendo en esta característica? Yo al igual que usted hermana necesito y deseo ser más prudente cada día, muchas veces fallo, pero entiendo que Dios en su gracia me perdona y me da la voluntad de continuar creciendo. Espero sea su disposición también.