Algunas amenazas que enfrentamos cuando trabajamos fuera de casa...Cuidado! (Parte 2)

El afán y la ansiedad 

Mateo 12.22-31 (busca tu biblia y lee este texto para una mejor comprensión)  

Dios no desea que caigamos en el afán. El nos dice que no hay motivos para estar afanadas. El afán se define como: deseo vehemente, dedicación o interés con que se hace algo, anhelo fatigoso, Trabajo excesivo, solícito y congojoso. Generalmente va acompañado de preocupación, de prisas, hacer mas allá de nuestro alcance. Lleva consigo desconfianza en Dios.  

Si nos fijamos el mundo vive así, nosotras como creyentes somos llamadas a tener paz en Dios. Que el tener la despensa llena, el closet lleno, las deudas pagadas, no se conviertan en el propósito de nuestra vida, causando angustia a nuestras almas sino lo obtenemos. Aun trabajes piensa siempre que: Dios fue quien proveyó el empleo, el te mantiene allí y si desea lo perderás, pero también piensa que todo sustento nuestro viene directamente de sus manos amorosas.  

Además de los económico, hay otras cosas que podrían agregar estrés a nosotras que laboramos fuera, tales como:  

• Mi casa no esta como me gusta (limpieza, orden, decoración), nos falta el tiempo. 
• Debo hacer muchas cosas a la vez (dejar los niños con quien los cuida, hacer compras, preparar la comida en la noche, ropa limpia, responsabilidades en la iglesia, escuela de hijos, mi esposo) 

Esto podría traer mucha ansiedad, estrés, hasta el punto de deprimirnos. Amada hermana, te motivo a detenerte y respirar, deja tus cargas en los brazos de Dios, el te cuida. Sino puedes cumplir cada cosa de la manera esperada, aférrate a su gracia y su misericordia, descansa en el. Yo he pasado momentos muy difíciles en este aspecto que hasta ha llegado afectar mi salud, estoy orando para que Dios me de su paz cada día.    

El orgullo y la vanidad 

Proverbios 31. 30 Engañosa es la gracia, y vana la hermosura; La mujer que teme a Jehová, ésa será alabada. 

1Timoteo 2. 9 Asimismo que las mujeres se atavíen de ropa decorosa, con pudor y modestia; no con peinado ostentoso, ni oro, ni perlas, ni vestidos costosos, 

10 sino con buenas obras, como corresponde a mujeres que profesan piedad. 

No podría ser un estudio para mujeres sino mencionábamos el tema de la belleza...no es así, solo bromeo. Pero es cierto que es una de las  áreas que mas debemos cuidar. En este nuevo empleo que tengo, se nos exige mucho una buena apariencia, tenemos pautas escritas sobre nuestro aspecto. Así que debemos cumplir con cada cosa exigida: cabello bien peinado y arreglado, ropa planchada y en buen estado, maquillaje discreto, uñas limpias y pintadas de forma prudente, el color de los zapatos, los accesorios etc...Se de otros lugares o empresas que también tienen estos o mas altos estándares.  

Que hacemos?, pues cumplirlos con prudencia. Cuidando de no llegar al orgullo y la falta de modestia. Cuida de que esto no se convierta en un ídolo, en una prioridad en tu vida. Que el verte bien llegue a estar por encima de tu relación con Dios y los demás. Cuida tu corazón de la envidia de otras compañeras por su cuerpo, ropa o carteras que pueden comprarse. Cuida tu corazón de la arrogancia, de creer que eres mejor que aquellas hermanas de la iglesia que no tienen tus posibilidades en este aspecto. Teme a Jehová.  

Palabras Finales... 

Asta aquí hemos llegado en este tema, se que hay otras amenazas. Si deseas puedes compartirnos las que haz vivido en el pasado u otras que enfrentas en estos momentos. Pero sobre todo recuerda que tenemos la palabra de Dios para contrarrestar toda amenaza. Llena tu corazón de su palabra y ella definirá tu carácter.  

Bendiciones Eli