miércoles, 27 de febrero de 2013

Dia 7



     Sal 119:7  Te alabaré con rectitud de corazón
 Cuando aprendiere tus justos juicios.

Continuando con los múltiples beneficios que obtenemos de vivir conforme a la palabra de Dios, encontramos este verso, “solo podemos alabar a Dios con pureza cuando aprendamos su palabra y seamos obedientes a la misma. Muchas de nosotras pretendemos alabar a Dios a través del canto, la dramatización, la enseñanza o con nuestras palabras, pero es imposible que esta alabanza llegue a Dios si nuestro corazón está lejos de Él, de su palabra. No podemos alabar a quien no conocemos, de quien no estamos maravilladas, a quien no amamos o tememos. Entonces me dirás pero…yo amo a Dios, yo le adoro cada domingo en la mañana… y yo te preguntaría… ¿Cuándo fue la última vez que oraste, leíste la biblia o la estudiaste? ¿Cuánto tiempo diario estas apartando para estar en comunión con Dios y su palabra? 

Alabar a Dios es ofrecernos a Dios, la palabra que se utiliza en el original denota una mano abierta dando algo al Señor, ¿Qué debemos de dar? Pues gloria y honra a Dios. Para poder alabarle correctamente debemos primero aprender los justos juicios de Dios, la biblia y su influencia en nosotros hará que le alabemos de forma espontanea y genuina…Jeff Adams escribió: “La ausencia de alabanza es una confesión de una vida que no está afinada con la Palabra de Dios”, esto nos dice que solo de un corazón consagrado a la palabra de Dios brotara la alabanza que agradara a Dios. El salmista deseaba alabar a Dios con rectitud de corazón, rectitud es trazar una línea recta por la que debemos andar o vivir y esta línea es la palabra de Dios quien la dirige. Nuestra adoración se obstaculiza cuando en desobediencia nos desviamos de esa línea. 

Debemos aprender los justos juicios de Dios para alabarle correctamente…hazte una pregunta ¿Quiero vivir una vida correcta de adoración a Dios? Si tu respuesta es sí, hazte esta segunda pregunta… ¿Estoy yo dedicando tiempo a conocer la palabra de Dios y poniéndola por obra? Y para aquellas que se glorían de ser estudiosas de la palabra… ¿Cuál es tu propósito al hacerlo? El salmista deseaba alabar a Dios, darle gloria, honra a Él, para eso quería aprender la palabra de Dios… ¿es ese tu propósito al estudiar las escrituras? Tenemos un desafío importante ¿estás dispuesta a tomarlo? 

Bendiciones!

Eli

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